lunes, 22 de abril de 2013

Barbol


Descripción
El personaje de Bárbol es un ent, una raza fantástica creada por J. R. R. Tolkien y cuyos miembros tienen una forma corporal semejante a un árbol, aunque poseen capacidades humanas como las de pensar, hablar o andar. En El Señor de los Anillos es descrito como «muy robusto», con una altura de unos catorce pies y con la piel (o corteza) de color gris verdoso, unos brazos lisos y pardos, y unos pies de gran tamaño con siete dedos cada uno; su cabeza, también de un considerable tamaño, está encajada en los hombros y su cara es larga, con una abundante barba gris, ramosa en las raíces y mohosa en las puntas. Sus ojos, descritos como «lentos y solemnes, pero muy penetrantes», son de color castaño y están atravesados por una especie de luz verde.




«Uno hubiera dicho que había un pozo enorme detrás de los ojos, colmado de siglos de recuerdos y con una larga, lenta y sólida reflexión; pero en la superficie centelleaba el presente: como el sol que centellea en las hojas exteriores de un árbol enorme, o sobre las ondulaciones de un lago muy profundo. No lo sé, pero parecía algo que crecía de la tierra, o que quizá dormía y era a la vez raíz y hojas, tierra y cielo, y que hubiera despertado de pronto y te examinase con la misma lenta atención que había dedicado a sus propios asuntos interiores durante años interminables».

Peregrin Tuk en «Bárbol», El Señor de los Anillos de J. R. R. Tolkien.


Su voz, acompañada de constantes murmullos y sonidos retumbantes, es descrita «profunda como un instrumento de madera de voz muy grave». Según asegura Humphrey Carpenter en J. R. R. Tolkien, una biografía, el autor le explicó en alguna ocasión a Nevill Coghill, uno de sus compañeros del Exeter College de Oxford y del cenáculo conocido como los Inklings, que había basado la forma de hablar de Bárbol en la estruendosa voz de uno de sus mejores amigos: el también escritor C. S. Lewis. Además de éntico, el ent sabe hablar oestron y quenya, a la que considera «la más noble de las lenguas apresuradas», y como el resto de sus congéneres tarda mucho tiempo en tomar una decisión, pensando en todos los detalles hasta estar seguro.

Además de Bárbol, juego de palabras que proviene de la traducción de su nombre original en inglés (Treebeard: «barba de árbol»), también es llamado Fangorn, cuyo significado es el mismo pero traducido de la lengua élfica sindarin. No obstante, ninguno de ellos es su nombre verdadero y este no es mencionado en toda la novela, pues según el propio ent «llevaría mucho tiempo» dado que siempre crece y es como una historia. Durante la conversación que mantiene con los hobbits Pippin Tuk y Merry Brandigamo en la sala del manantial, uno de sus hogares en el bosque de Fangorn, Bárbol dice ser uno de los ents más viejos que aún quedan con vida en la Tierra Media junto con Zarcillo y Corteza a finales de la Tercera Edad del Sol, época en la que se desarrolla El Señor de los Anillos.
Historia

El 29 de febrero del año 3019 de la Tercera Edad del Sol, durante la Guerra del Anillo, los hobbits Pippin y Merry entraron en el bosque de Fangorn escapando de las huestes orcas que los tenían capturados y se encontraron con Bárbol. Si bien en un principio el ent desconfiaba de ellos porque los hobbits no se encontraban en su lista de criaturas vivientes, al saber que eran amigos de Gandalf, descrito por Bárbol como «el único mago a quien realmente le importan los árboles», les dio cobijo en una de sus moradas en Fangorn, la sala del manantial.

Allí los hobbits le contaron algunas de las aventuras que habían vivido desde su salida de la Comarca y él a su vez les contó historias sobre su pasado, incluyendo la desaparición de las ents mujeres y de su amada Fimbrethil. Sin embargo, se enojó al recordar sus encuentros en Fangorn con el mago Saruman, quien en esos momentos estaba arrasando parte del bosque para alimentar los fuegos de su maquinaria. Entonces Bárbol decidió convocar a la cámara de los ents para convencer a éstos de que debían detener a Saruman y tras tres días de deliberación decidieron atacar la fortaleza de Isengard.


Bárbol fue hasta las puertas que guardaban el valle fortificado y llamó al mago, solicitándole su rendición; no obstante recibió como respuesta el ataque de los orcos y los ents destruyeron las puertas y parte de las murallas, comenzando a atacar la torre de Orthanc, donde el mago se encontraba. Bárbol, temiendo por los suyos ante el encendido de la maquinaria de Saruman y al ver como uno de los ent era quemado por completo, ordenó que pararan el ataque. Los ents taponaron entonces el río Isen y por la noche soltaron losdiques, de forma que el agua inundó el valle y apagó los fuegos. Tras alcanzar la victoria Bárbol se encargó de la custodia de Saruman, quien se había encerrado en la torre; el lacayo de este, Gríma, llegó a Isengard al poco tiempo y siguiendo las instrucciones de Gandalf, quien ya le había prevenido sobre él, Bárbol le obligó a acudir junto a su amo. No obstante, al no ser capaz de ver a un ser vivo encerrado, el ent acabó dejando marchar a ambos, asegurándose de que Saruman cerraba Orthanc y le entregaba la llave para devolvérsela a su propietario, el rey de Gondor.